Una de las variables que forman parte del gran concepto de la Inteligencia Emocional, es el Autocontrol, o el cómo controlar las emociones y los sentimientos.
El termino variable, como tal, nos indica tratarse de algo que puede variar, concretamente , con el entrenamiento del control emocional y la práctica en ello.
Índice
QUÉ ES EL AUTOCONTROL
El Autocontrol, es aquello que nos permite expresar las emociones de una forma apropiada al momento en que se producen. De la manera más adaptativa a la situación.
Sin embargo, como ya hemos comentado en varias ocasiones, no son tanto las situaciones que vivimos las que nos hacen sentir de una manera u otra, sino el cómo las pensamos, cómo las interpretamos.
Por tanto, el responsable de nuestras emociones, su generador, es nuestro propio pensamiento. Y he aquí, entonces, la clave del cómo control las emociones y sentimientos, de nuestro Autocontrol. Podremos cambiar lo que sentimos con el autocontrol emocional y el cambio de nuestro pensamiento.
Podremos aprender a cómo controlar las emociones, controlando nuestro pensamiento.
FORMAS DE CÓMO CONTROLAR LAS EMOCIONES
1. Identifica y maneja tu pensamiento.
Como te comento en mi libro: «La guía del pensamiento», con el pensamiento podemos hacer distintos manejos.
Pongámonos a ello entonces, ¿cómo podríamos «maniobrar» con nuestro pensamiento?
El pensamiento podemos cambiarlo, tratando de ver de manera diferente las cosas, relativizando… Imagina una escala del 0-10. El 10, significa «lo terrible», significa que tras haber sucedido esto, no podrás volver a sentir nada bueno… ¿Realmente se merece esa puntuación aquello que estás viviendo?
Dentro de este cambio, también podemos confrontarlo, y esto es, hacer que se parezca lo máximo posible a la realidad que nos rodea. Y digo lo máximo posible porque no deja de ser nuestra percepción del mundo, algo fruto de nuestro propio procesamiento y por tanto algo puramente subjetivo;
Por último, a nuestro pensamiento podemos pararlo, detenerlo, o lo que es lo mismo, cambiarlo por otro, de otro contenido totalmente distinto.
Con estos tres manejos de nuestro pensamiento, conseguiremos cambiar nuestras emociones, de la manera que más nos convenga. De la manera más adaptativa.
Pongamos un ejemplo: Imaginemos que, de camino al trabajo, nos encontramos con un atasco.
Tenemos varias opciones, de interpretar, de pensar sobre la situación:
– Podremos pensar:
¡Qué mala suerte! ¡no vamos a llegar! ¡vaya forma de empezar el día! o incluso… ¡nuestro jefe nos echará la bronca! lo que nos haría ponernos nerviosos, inquietos y es probable que esto se llegara a manifestar en nuestra conducta, tocando el claxon del coche o incluso gritando como energúmenos al conductor de delante…
– O, por el contrario, tenemos la opción de, ya que vemos que estamos atascados, aceptar que no podemos hacer nada por salir de ahí, que tampoco se hunde nuestra empresa porque lleguemos tarde e incluso podríamos optar por elegir una bonita canción de la radio del coche y disfrutar de ese momento… ¡¡¡Eso es Autocontrol!!!! Y una muy buena forma de cómo controlar las emociones.
Conseguir que ante una situación, en principio nada positiva, con el cambio de pensamiento, nuestras emociones cambien a un estado más agradable.
Y es que, no lo olvides nunca: el autocontrol emocional no es reprimir ni tapar lo que se está sintiendo, sino conseguir canalizar las emociones de tal forma, que nos haga sentir mejor o al menos de manera más neutra.
2. Tómate un tiempo para responder.
Obviamente, para hacer todo esto del manejo del pensamiento, deberás disponer de tiempo. El famoso «contar hasta diez». No tendría porqué ser mucho más…
Lo cierto es que, el manejo de pensamiento, ya sea: cambio, confrontación o parada, es un proceso que está ubicado en el tiempo. No es que sea cuestión de tiempo, no. Es que hace falta tiempo para poderlo llevar a cabo.
3. Practica meditación o mindfulness.
Está demostrado que la práctica de la mente plena, ayuda a funcionar mejor, gracias a un comportamiento adaptativo y ello es gracias a un mejor control de las emociones y sentimientos.
Meditar te ayuda a la toma de conciencia de tus propios sentimientos y emociones y así a poder hacer una mejor evaluación de estos, para proceder al cambio si se considera necesario.
4. Escribe lo que sientes.
Tener un diario de las situaciones emocionales que vives, permite que si has pasado por una situación donde te ha costado controlar lo que sentías y tu reacción, lo puedas analizar, hacer el cambio hipotéticamente, para luego poderlo aplicar en situaciones similares.
Al fin y al cabo, somos muy repetitivos y la vida nos da muchas oportunidades.
5. Acude a psicoterapia.
Si en tu vida se han dado bastantes situaciones en las que por el control de tus emociones, tú mismo o los que tú quieres, se han visto perjudicados, lo mejor es que pidas ayuda.
En mi consulta de psicoterapia online, ya son bastantes los casos, que como os comentaba anteriormente, acuden para trabajar su Inteligencia Emocional, lo que más concretamente puede ser el autocontrol, como el que acude al gimnasio a trabajar su cuerpo.
Así que, con todo esto, si crees que tienes problemas para manejar tu autocontrol y esto que te planteo te resulta complicado, te invito a que contactes conmigo y junt@s encontremos la manera de hacerlo.
Si te ha gustado la entrada de hoy sobre cómo controlar las emociones y los sentimientos, me encantaría ver «tu like». Te espero en los comentarios.
